-Miro al suelo...Piedra, un corazón de piedra es lo que tienes; dijo él.
Aquel que horas antes le vio destrozada, y no literal, si no en el suelo
ahogada en lagrimas, por un auxilio, por una muerte, por un amor...-
II.-
-Piedad hombre; calla y termina, no vez que ya no quiero, ni puedo...Ah!. El último aliento y una lagrima corrió ante el desahogo de una noche infernal entre aquellos brazos. Le dejó ahí con el alma desnuda, y su seca sonrisa de satisfacción-
III.-
-Paso el tiempo pensando tan solo en ti, cuando tengo tanto por descubrir... Fácil me dices "No lo hagas mas" Te marchas, me olvidas, te olvido y al tiempo regresas, como si aquel adiós no valiera. Que hago con estas ansias, con este dolor...que por ti, me esta matando.-
-Paso el tiempo pensando tan solo en ti, cuando tengo tanto por descubrir... Fácil me dices "No lo hagas mas" Te marchas, me olvidas, te olvido y al tiempo regresas, como si aquel adiós no valiera. Que hago con estas ansias, con este dolor...que por ti, me esta matando.-
-Y por la noche... Lágrimas tristes que rompen el silencio de esa divina quietud. Que profano es el dolor del amante, decido a esperar, luchar aún con el penoso adiós, que espera nunca llegué, más no se cierra a su llegada. Todo por las falsas dudas que su dulce amor creé tener. Y que pesada es la noche sin un abrazo tierno,
constante de amor que le entregaba. Ruega a la luna ese fiel amante para ser feliz; sin la existencia de esas dudas que le han de envenenar el alma a su dulce amor.-
